Somatic Experiencing con perros
Nunca me había planteado trabajar con los perros, pero como ellos siempre están cuando trabajamos con los caballos, día a día he podido observar como se hacen un hueco en cada grupo, como se colocan al lado de la persona que lo necesita. Con su alegría, su entusiasmo roban el corazón de quien más lo necesita. Y así hemos incorporado nuevos miembros a la manada canina.
Los perros nos ayudan a trabajar cuando las personas no pueden venir a la naturaleza donde están los caballos. Estos perros tan pequeños están siempre contentos, son la alegría personificada, y no se hacen extraños con nadie. Aunque se parezcan mucho sus personalidades son muy distintas. Estos pomerania de Can Bruch hacen un trabajo espléndido. Conectan con los niños de forma natural y nosotros seguimos el camino que ellos empiezan.
Perros que no pasan desapercibidos, mirados muchas veces con prejuicios. Perros muy ágiles, eso si pequeños de tamaño, pero muy vivos y de muy buen carácter.
Para que puedan trabajar bien, a nosotros nos queda velar por su salud. Limitando el tiempo de las sesiones cuando muestran signos de cansancio o estrés. Y dejandolos ser perro el tiempo suficiente para mantener siempre esta alegría que les caracteriza.
Con ellos empezamos esta nueva etapa, haciendo llegar la terapia somática a los niños. Sobretodo niños que han sufrido experiencias traumáticas diversas. A veces es más fácil conectar con uno de estos pequeños, a través del juego. Y así poder ir entrando en la terapia somática, que a través de las sensaciones podrá ayudar a liberar, a gestionar, a no encerrarse.
Con ellos realizaremos el proyecto social del 2016
