trauma y superación personal
Nuestro cuerpo es un libro donde todas las experiencias vividas han escrito un capítulo, más corto o más largo. Y algunos siguen a medio escribir, sin cerrar. Los más difíciles de escribir, de leer. Imposible darles fin. Continúan vigentes aunque se empezaron a escribir hace mucho tiempo.
No se trata de arrancar esos folios, sino de reescribirlos de otra manera, para poder al fin pasar página y descansar. Las experiencias desbordantes, las que en su día fueron demasiado, o que se repitieron demasiadas veces, las que sobrepasaron nuestros límites, a las que debimos enfrentarnos sin recursos, todas esas experiencias dejaron una huella demasiado profunda en nuestro sistema nervioso.
El trauma provoca respuestas desmesuradas a situaciones normales. Nos obliga a vivir en un estado continuo de amenaza. Puede encerrarnos en nosotros mismos, nos distorsiona la visión de la realidad. Vemos miedo en todas partes o en ninguna. Y en la distorsión es muy difícil vivir.
Trabajando a partir delas sensaciones en el cuerpo, podemos ir estirando del hilo, para que, poco a poco, los patrones de comportamiento traumáticos puedan ser cambiados a patrones más adaptados. Liberándonos de la esclavitud que supone reaccionar a cada estímulo y no ser capaces de gestionar las situaciones cotidianas.
La terapia somática permite tomar conciencia de en qué punto de nuestra vida estamos. De donde están nuestros bloqueos, para así poder superarnos y alcanzar las metas que nos propongamos. Una mira al cuerpo a través de las sensaciones. Mejora la gestión emocional generando recursos para los momentos de más intensidad, generando más capacidad de poder estar en nuestro centro en circunstancias más difíciles.
Los caballos nos proporcionan una ayuda inestimable, al proporcionarnos situaciones reales donde nuestro sistema nervioso queda al descubierto para poder evidenciar como reaccionamos delante del peligro o de lo que percibimos como peligro. Reaccionan de manera instantánea a cada cambio energético que se produce en nosotros. Nos permiten, si tenemos el valor y la honestidad, de ver quien realmente somos. De crecer en nuestros puntos fuertes y mejorar en nuestras dificultades. Todo ello sin juicio y de una manera clara y precisa.
Todo lo que vivimos y experimentamos queda integrado en el cuerpo. El trabajo en la naturaleza facilita este reencuentro con el cuerpo y las sensaciones que lo habitan.
Somatic Experiencing, más información sobre la certificación de Peter.A. Levine